木曜日, 10月 26, 2006

26/11/2006: Es Un FrIo DiA! -Y hasta la flor más bella o fuerte puede marchitarse-
Dicen que el tiempo cura todo lo malo que alguna vez se ha visto impuesto o auto-impuesto en nuestras vidas, pero lo que algunos temen contar es que los recuerdos afortunadamente para algunos o desafortunadamente para mi, no se borran con nada, ni con resquicios de felicidades permanentes o prolongadas, aunque tampoco quiere decir que este ultimo estado, resulte ser mi caso. Comienza a vislumbrarse, entonces, el camino sin fin hacia lo que parece una etapa de recuerdos casi lindos que me hacían sentir de cierto modo en un estado de estupidez o felicidad involuntaria, lo que para este –mi- caso, si resulta igual, es que el ser humano es el único de la especie planetaria que no aprende de sus errores, quizás por la añoranza de aquellos ciertos momentos que parecían verse bien, siendo este último mi caso individual y el de muchos. -Me encuentro escribiendo estas líneas llenas de sentimientos entrecruzados de felices momentos y una tristeza casi agónica que me hace recordarlo todo, lo que no deja más que demostrar mi estado de “?” casi voluntario-

Pese a que los eventos que parecen no tener mayor relevancia para muchos resulta un hecho o recuerdo imborrable en mi memoria y mi alma, llena de miedos… extraño todo eso, no importándome si esto viene del cielo o el infierno. Todo resulta muy confuso en dias fríos como estos.

月曜日, 10月 23, 2006

StrAnGe!

Hace pocos instantes todo pareció verse inmerso en una extraña nebulosa, a la cual siento cada día no pertenecer, pese al más amplio sentido de receptividad que mantengo ante este tipo de situaciones. ¿En qué mundo viviré?, esa fue una de las instantáneas preguntas que pude hilar al preciso instante en que mi cara de auto-decepción era apreciada por la mayoría inconciente de todos los que han pensando eso de mi, en el preciso momento y lugar.

Urdiendo en mi alma pequeños gestos de aceptación o bien conformismo frente a lo que me parece importante a ratos del día... Sintiéndome cada vez más lejos de lo que mi conciencia hace llamar “su propia vida”, quizá ocurriendo todo por mi creciente inseguridad, la que no parece dejar rastros de desaparición últimamente. Sé que debo aprender más de mi, de mis sentimientos, conflictos, debo saber lo quiero o no, lo que busco o debo buscar, lo que necesito y lo que no, pero, créanlo, a ratos parece más complicado que concretar una utopía, lo que se complica mucho más si pensamos en el engranaje existente y que mueve el mundo, a la vida y a mí.

Muchas veces es mejor sentir para funcionar, en vez de pensar como debemos actuar, dejando atrás cientos de resquemores que podríamos acumular en nuestra propia conciencia y en lugares más difíciles de hallar o poder explicar, porque hasta el alma resulta extraña cuando se mezcla o reconoce la hibrides de otra cerca de ella, descubriendo lo que parece ser la realidad de nuestra propia vida, o al menos la mía…